No hay duda que los clientes son la clave
para que cualquier negocio alcance el éxito. Así de obvio y así de complicado a
la vez. Conocer, clasificar y empatizar con nuestros clientes o visitantes hará
que nos adelantemos a las necesidades de los mismos, desarrollando un negocio
viable y rentable. Comencemos por la medida que nos permita tomar decisiones.
Por ello, ¿cómo conocer a nuestros
clientes y porqué es necesario para el negocio?
Si conocemos el comportamiento de los
consumidores, podremos mejorar su experiencia de compra y así responder mejor a
sus expectativas. Pese a ello, cuando se pregunta a muchas marcas por su
público objetivo, contestan cosas del tipo “hombre de entre 35-50 años, poder
adquisitivo medio, con estudios universitarios… ” Es completamente normal, pero
no suficiente.
La información que necesitamos para hacer
esto no es solo la demográfica. Los números están muy bien, pero es muy
importante también tener en cuenta el punto emocional, qué piensa, etc. ya que
es ahí dónde vamos a marcar la diferencia y crear mayor interés en ellos.
La importancia de conocer a tus clientes como a ti mismo
Uno de los objetivos prioritarios de
cualquier negocio, hoy en día, debe ser conocer más y mejor a los clientes,
para intentar adecuar la oferta a sus intereses. Y este objetivo, no es
fácil. Existen tantas clases de
clientes, como humanos en la Tierra, cada uno con expectativas y
características que lo diferencian.
Comprender lo que necesitan los clientes y
cuáles son sus costumbres nos ayudará a encontrar más oportunidades de negocio,
llegar mejor y a más clientes y diferenciarnos.
Cómo conocer a tus clientes
Para entender a la perfección al cliente que
entra a nuestra tienda o contrata nuestros servicios, debemos esforzarnos en
las siguientes etapas: identificarlos, diferenciarlos, interactuar con ellos y,
por último, personalizar la experiencia.
Por ejemplo, ¿han oído hablar del mapa de
empatía? Se trata de una técnica
creativa que proviene del libro “Generación de modelos de negocio” con la que
podremos conseguir un perfil del cliente de forma muy sencilla.
Para conocer a nuestro cliente hay que tratar
de meterse en su cabeza y saber qué necesita. Y esto no es nada fácil. Por eso,
el mapa de empatía nos ayuda a formularnos las preguntas adecuadas para que
intentemos darle respuesta con la mente puesta en él y solo en él. No en
nosotros, ni en lo que queremos conseguir, cómo vamos a conseguir llegar, si no,
en el usuario.
Con la información extraída de preguntas
como: ¿qué obstáculos se encuentran para satisfacer su necesidad?, ¿qué es lo
que le preocupa? ¿Qué más esperaría Ud. como cliente?, etc.
Customer Centric: el cliente en el centro de tu estrategia
Hoy, más que nunca, muchas marcas necesitan
aplicar una estrategia customer centric para soportar la presión competitiva a
corto plazo y poder maximizar los beneficios a largo plazo.
El objetivo del customer centric es alinear
la conceptualización, desarrollo y comercialización de los productos y
servicios de la marca, con las necesidades y deseos de sus clientes más
valiosos.
Algunas de sus premisas son:
- Dedica tiempo a conocer bien a tus
clientes.
- Comprende que no todos los clientes
son iguales y no merecen los mismos esfuerzos y atenciones. Desde la
perspectiva del customer centric, existen dos clientes: los buenos y el
resto. Habrá que invertir más tiempo y recursos en los mejores clientes,
pero sin olvidarse de los demás.
- Pese a lo que siempre nos han
dicho, el cliente no tiene siempre la razón y no todos los clientes son rentables.
- Personaliza la relación con
tus clientes.
- Diseña productos customer centric
teniendo en cuenta al cliente en todas las decisiones de conceptualización
y diseño de nuevos productos. No practicar esta premisa explica el porqué
de que la gran mayoría de los productos, aunque sean buenos, son un
fracaso.
- Trabaja en ofrecer la mejor experiencia posible.
En definitiva, una estrategia que no puede
llevarse a cabo sin dedicar recursos a conocer a los clientes. Además, tiene un
fin muy específico: maximizar los beneficios de la marca a largo plazo. Y este
es el objetivo que todas las marcas persiguen, pero solo aquellas que estén
dispuestas a dar un giro a sus viejas concepciones conseguirán el éxito.
Pero, cuidado. La estrategia de customer
centric no implica que los clientes menos valiosos deban ser ignorados. Todo lo
contrario. Esta clase de clientes, bien
gestionada, puede aportar una gran estabilidad a la prosperidad del negocio.
Llevando esta idea un poco más lejos, nos
encontraríamos con lo que se conoce como la paradoja de la centralidad del
cliente: cuanto más se centre una marca en sus clientes más valiosos, más
necesitará a los clientes de bajo perfil para equilibrar el desarrollo de su
negocio. Puede servirnos de ejemplo la alta costura y sus consiguientes líneas
de difusión.
Ed Sage
E-mail: ayc@ayc-investigacion.net
Website: www.ayc-investigacion.net
Telf.: (511) 571 3441, Cel. 980201360, 955099996, 980524679
"Cuando Ud. reciba su trabajo de investigación, no solo recibirá un informe, recibirá la solución y las respuestas que buscaba"
No hay comentarios:
Publicar un comentario